Hoy en Cataluña hay elecciones autonómicas. Dos años después de
las anteriores, los catalanes se vuelven a reunir en torno a las
urnas ¿para elegir qué?
Para algunos, es la posibilidad de llevar a la realidad sus sueños
independentistas; para otros, todo lo contrario; para todos, un nuevo
equipo de gobierno con un presidente a la cabeza que pueda ¿sacar a
los catalanes de la crisis?
La crisis no es solo catalana, la crisis es nacional y también
europea. En España el Partido Popular no esta haciendo nada por
ayudar a los ciudadanos a salir de la crisis, mas bien los está
hundiendo más aún, con esas políticas de privatización, copagos,
robo de derechos y anulación de ayudas económicas.
En Cataluña no es distinto, la sangría a la que Artur Mas ha
sometido a la población catalana en estos dos años solo ha servido
para arruinar más a las familias, además ha aumentado el déficit
catalán a niveles nunca antes vistos. Acorralado por la situación
creada por su propia ineptitud, al dirigente de CIU y actual
Presidente de la Generalidad de Cataluña no se le ocurre otra cosa
que anunciar un referéndum para, con un resultado favorable, pedir
la independencia de Cataluña.
El revuelo está servido; honradamente, no me creo que Artur Más
quiera la independencia para Cataluña, su objetivo es vender humo,
dar a la población unos argumentos para que no hablen de otros, de
los verdaderos, del agujero económico que deja a su paso y del que
hace máximo responsable al estado español, cuando él es el único
responsable de las privatizaciones en sanidad, de las restricciones
en educación, del copago, del euro por receta. Ha hecho la misma
política económica que el Partido Popular, ¡no! ha sido más duro,
más agresivo, más pionero (fue el primero en implantar el euro por
receta).
Y en el fondo subyace, el referéndum. Los amantes del «una grande y
libre» se escandalizan, la derecha nacional los primeros, y algunos
políticos del centro también. Se centran en la ilegalidad del
referéndum, en la ruptura de España...
Escribió Evelyn Beatrice Hall, biografa de Voltaire: «Podré
no estar de acuerdo con lo que dices, pero daría mi vida por
defender tu derecho a decirlo». (Maravillosa frase atribuida erróneamente a Voltaire).
Los catalanes tienen derecho a tener un referéndum, todos los
catalanes, no solo los que viven en Cataluña; y el resto de
españoles (gallegos, vascos, castellanos, andaluces, valencianos...)
que convivimos con ellos también tenemos ese derecho, porque el
resultado nos afecta a todos. Para bien o para mal, juntos convivimos
y juntos decidimos. Y si hay que cambiar leyes para hacerlo, se
cambian; en un país democrático no debería haber impedimentos para
hacer consultas a la población. Yo puedo no estar de acuerdo con la
realización de ese referéndum, de hecho tengo dudas, pero soy el
primero en defender su existencia, en crear un espacio de debate
sobre la verdadera realidad de la separación de Cataluña del resto
del país. Desmitificar toda esa ristra de mentiras y medias verdades
que se dicen de un lado a otro de la ribera del Ebro.
Es evidente que la verdadera razón de Mas en este viaje es el
control de los ingresos, de todos los ingresos y la ausencia de
control en el gasto, verdadero caballo de batalla. Si consigue del
gobierno español más control económico para el gobierno catalán y
menos control en el gasto, dará por concluido el viaje
independentista.
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